Yo diría que la burrata es una maravilla, sin más. Pero si nos vamos a su definición real tengo que contarles que es un queso italiano fresco y cremoso, cuya fina capa exterior es de mozzarella y va relleno de straciatella (crema de leche).

Este queso de pasta hilada y crema es originario de la región de Puglia en el sur de Italia, donde es un requisito legal hacer tanto la burrata como la mozzarella con leche de búfala. Pese a las leyes italianas también se suele hacer este queso con leche de vaca, versión que se conoce como “Fior De Latte” en su país de origen.

Su nombre proviene de “burro” que en Español significa mantequilla. Su origen data de principios del siglo pasado (1900) y se cuenta que comenzaron a hacer burrata para aprovechar los restos que quedaban de la mozzarella.

El sabor es muy característico y delicado, aunque no tan neutro como el de la mozzarella. Viene en forma de saquito envuelto en una bolsa plástica muy fina, y es un queso tan sumamente fresco que apenas abrirlo se deshace y debe consumirse siempre a los pocos días de su preparación (unos 3 o 4 días es lo recomendable).

Precisamente por su frescura y preparación artesana en Madrid es un peregrinar conseguirlo. Pero como soy muy intensa y cansina cuando quiero algo tanto caminé y pregunté hasta que di con unos pocos sitios donde se puede conseguir la burrata, además de un par de ideas de donde ir a probarla o cómo servirla en casa. 😉

¿Dónde probarla?

Seguramente habrá más de un Restaurante, Pizzeria, Gastro Bar o Resto Bar que tenga burrata en su menú, pero yo he repetido en dos: El Columpio en la Calle Caracas en Chamberí, donde sirven ensalada de burrata con aceitunas negras y piñones, sencilla, muy rica y perfecta para una cena ligera.

Luego está la Burrata Pugliese del Restaurante Don Giovanni de Andrea Tumbarello, en la Plaza Mariano de Cavia muy cerca del Parque El Retiro. Fresquísima, cremosa, perfecta y traída directamente de Italia. La hemos compartido un par de veces como entrante cuando comemos allí. Toda la carta del Don Giovanni es estupenda y aunque no cuesta poco comer allí vale muchísimo la pena.

Tengo pendiente probar la que tienen en Poncelet Cheese Bar, sitio que me han recomendado muchísimo pero aún no he podido acercarme. Les contaré cuando vaya.

¿Dónde comprarla?

En mi peregrinar en búsqueda de la burrata perfecta aun me falta probar un par de sitios, pero he dado con tres donde la podemos conseguir:

  1. Mercado de Barceló. Charcutería Luis, local 219. Aunque hay un par de puestos en el Mercado que tienen burrata yo la compro siempre pero siempre en este local de la planta baja, está siempre perfecta. Me comentan que se las traen los miércoles y como no es un queso que todo Dios compre, le llevan unas 10 cada semana. Pesa unos 300 grs o poco más y cuesta 5,50€.
  2. Gold Gourmet. C/Goya 7 (Platea) y C/José Ortega y Gasset 85. Muchos dicen que allí tienen la mejor burrata de Madrid, incluso traen burrata trufada que es dificilísima de conseguir en Madrid. la burrata normal cuesta 7,95€ y la burrata trufada 9,85€. Esta semana la traje para comer en casa un día y ha valido la pena el peregrinar para probarla. Es riquísima aunque en mi opinión hay burrata en otros sitios igual de buena.
  3. Mangitalia en la C/Galileo 84. Tienen una tienda buenísima de productos italianos y dos tamaños de burrata. La burratina de aprox. 150-200 grs y la burrata de 300-500 grs. La pequeña es perfecta cuando no queremos comer de más o sólo queremos una ensalada para uno sin que nos vaya a sobrar, creo recordar que fueron menos de 4€ por la burratina.
  4. Accademia del Gusto en la C/Cristobal Bordiú 55. Tienen tienda online pero hay que llamar a la tienda física para encargar burrata. Aún no la pruebo, por allí pasaré.

¿Cómo prepararla?

Con la burrata no hay que cometer el error de agregar demasiadas cosas, está perfecta así como está, en una ensalada de pocos ingredientes o en una pizza o sandwich con buen pan y poco más.

No es que sea un queso que compre todas las semanas pero de vez en cuando viene conmigo a casa, sobre todo para cenar con amigos o cuando queremos compartir cualquier ensalada. Yo la suelo preparar de tres maneras, aquí les cuento:

  • En un plato de embutidos donde la burrata ha sido el ÚNICO queso, apenas rociada con pimienta recién molida y aceite de oliva extra virgen. Un buen pan de hogaza, una copa de vino y listo.
  • En una ensalada para compartir con rúcula, tomates secos hidratados en aceite, almendras fileteadas, aceite de oliva extra virgen, vinagre balsámico y unas poquísimas escamas de sal.
  • En un sándwich de pan de focaccia con mortadela italiana, rúcula, calabacín en láminas muy finas y aceite de trufa.

Hoy quise hacer una milhoja de burrata trufada y piquillos pero,  al ser tan cremosa y fresca se deshacía un poco cuando intentábamos armar las capas con el aro de emplatar.

Poco importó, nuestra ensalada estuvo maravillosa.

Si no han probado burrata y son groupies de los buenos quesos como yo, tienen que comerla un día. Nadie se arrepiente nunca de catar algo tan glorioso. Démonos todos siempre el gusto de desconectar y descubrir, de probar. Hoy prométanme que cenarán muy rico y se mimarán mucho.

Mientras, yo sigo con mis gastro tours y mi cocina, probando e inventando cosas para luego contarles. Por supuesto que se aceptan todo tipo de recomendaciones, datos y tips para seguir catando maravillas y cocinando en casa, esperaré los comentarios. 😀

¡Abrazos y feliz noche!

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