Aunque soy muy fan de ir a desayunar fuera y probar cosas nuevas, hay días en los que sólo me apetece hacer pan o bizcocho en casa y prepararme mucho café. Por eso, cada vez que veo una receta de pan sencilla y medianamente rápida la tengo bajo la manga, y la voy probando cuando tengo tiempo.

Si hay algo maravilloso para un desayuno es poder tener pan recién hecho y calentito siempre a mano, y hay pocas cosas más ricas que un buen pan casero. Hay quien le tiene miedo a las masas, pero es realmente sencillo una vez tienes la práctica. Incluso luego de hacer el pan podemos congelarlo e ir sacando sólo lo que calentaremos para comer.

Hace días vi en el programa de Anna Olson, en Canal Cocina, tres propuestas de recetas de pan, y comenzaba con una sencillísima de maíz y trigo que decidí guardarme, releer, y cambiar unos ingredientes, porque no soy yo si no tuneo una receta. Es un plato originario del sur de Estados Unidos y se utiliza generalmente para acompañar otros platos.

Tuve que preguntar qué tipo de harina de maíz tocaba utilizar. Sabía que no era almidón de maíz (Maicena), pero tenía la duda de si podía usar Harina de Maíz pre cocida(para arepas) o Harina de Polenta. Y sí, había que utilizar sémola de maíz (harina para polenta), que se puede conseguir en cualquier herbolario o supermercado.

Pero antes de seguir con la charla mejor me organizo y les dejo la lista de ingredientes:

  • 170 grs de sémola de maíz (harina para polenta).
  • 170 grs de harina de trigo (los celíacos la pueden sustituir por espelta o harina de avena).
  • 280 grs de crema agria o yogurt natural sin azúcar.
  • 100 grs de aceite de girasol.
  • 2 huevos grandes.
  • 3 cdas de miel o sirope de ágave.
  • 2 cdas de vinagre.
  • 2 cdtas de levadura Royal (polvo de hornear).
  • ¾ cdtas de bicarbonato.
  • ½ cdta de sal.
  • 150 grs de queso cheddar rallado.
  • 150 grs de maíz dulce en grano.

Y sí, los líquidos se pueden pesar en gramos, y en este post anterior les contaba
cómo. ¡Ah, y hay que pre-calentar el horno a 190 grados!

Preparación:

  1. Hidratamos la sémola de maíz con la crema agria y dejamos reposar.
  2. Mezclamos los ingredientes secos (Harina de trigo, sal, levadura, bicarbonato y queso rallado) y reservamos.
  3. A la mezcla de sémola y crema le vamos agregando los ingredientes líquidos (huevos, aceite y miel) y mezclamos con un batidor de varillas para que se incorporen bien.
  4. Agregamos el maíz en granos y los ingredientes secos a nuestra mezcla y batimos hasta tener una pasta homogénea.
  5. En un molde con papel de hornear (mejor si es alargado, como los que se utilizan para el pan de molde) ponemos la mezcla y llevamos al horno a 190 grados por 40 minutos o hasta que al pinchar con un palillo éste salga seco.
  6. Servimos caliente, y a ser felices. 🙂

Es un pan muy sencillo, que no requiere dejar reposar la masa ni es complicado en su preparación. El maíz en grano es completamente opcional pero le da un toque súper rico, y el queso evita que el pan sea en exceso dulce.

Podemos jugar a hacerlo más o menos salado y tenerlo para desayunar, o para acompañar unas costillas de cerdo o un pollo horneado en cualquier comida de domingo, o de merienda con un poco de mermelada. Es una de esas recetas que hay que marcar y guardarse porque está delicioso y nos va a valer para todo. 🙂

Yo como que lo repito pronto con unas costillas de cerdo y la salsa agridulce de mi Papá. Mientras sigo inventando, les mando un abrazo y muy feliz día.

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