Hoy toca cocina de aprovechamiento, con una de esas recetas express y resultonas que viene bien para aprovechar el arroz que nos haya quedado del día anterior y cae de lujo para acompañar cualquier comida.

Lo aprendí a preparar con Dorita, mi prima húngara a la que siempre intento sacarle recetas y trucos de cocina porque todos en su casa cocinan maravillosamente bien. Ella a su vez había aprendido algunos platos chinos con su hermano en tanto ir y venir de Beijing.

Se preguntarán que cómo es que tengo familia húngara y es que uno de mis primos la conoció hace mucho en algún pueblo de playa idílico de Venezuela, de eso hace muchos años y hoy en día los visito cada vez que puedo aprovechando que Budapest no lo tengo tan lejos.

Volviendo a la receta y dejando la historia de amor en Budapest, les cuento que para esta receta sólo necesitamos arroz, cebolla, jengibre, salsa soja china y un huevo. ¿Las cantidades mejor en una lista, no? Pues aquí vamos con los ingredientes:

  • Una taza de arroz cocido.
  • Una cebolla pequeña picada en cuadritos.
  • Una o dos cucharadas de jengibre fresco rallado.
  • Un huevo.
  • Un chorro de salsa soja (dos o tres cucharadas grandes). Insisto que mejor utilizar la salsa de soja china, porque la que se consigue en los supermercados tiene un sabor más dulzón y no le va tan bien al plato.

Y la preparación:

  1. La noche anterior, extendemos el arroz sobre una tabla de cocina para secarlo. Tocará buscarle sitio en la nevera para dejarlo secar destapado hasta el día siguiente. Lo podemos dejar secando sobre la encimera fuera de la nevera, pero en mi caso hubiese sido un banquete para el gato y desastre mayor en la cocina.
  2. Cuando vayamos ya a prepararlo, salteamos la cebolla picada en una sartén caliente con un poco de aceite de oliva (una cucharada grande es suficiente, no hace falta más).
  3. Cuando se haya aclarado la cebolla agregamos el arroz y el jengibre rallado, removemos bien. Luego echamos un chorro de salsa soja y mientras lo seguimos removiendo en una sartén a fuego medio para secarlo bien.
  4. Cuando el arroz se comienza a secar y comience a verse un poco más tostado apagamos la sartén y sin retirar del fuego agregamos el huevo mientras removemos bien todo para mezclarlo. El huevo se cocinará con el calor residual y si lo hacemos con el sartén apagado será mejor porque así no se nos seca en exceso.
  5. Servimos solo o acompañado con cualquier carne o pescado a la plancha. Yo alguna vez lo he hecho de cena express y ha sido más que suficiente.

Pues me voy de caminata y luego a la piscina, que más tarde me toca ensayar alguna otra receta para la cena.

Ya casi estoy escuchando a Dorita preguntar ¿Cuándo vienes de nuevo, Karlita? Ojalá que pronto, siempre tenemos mucho que compartir, aprender, conversar, bailar, probar en la cocina y mucho mucho que jugar y abrazar a mis peques adorados.

Ir a verlos siempre es maravilloso.

Pin It on Pinterest