Para mi esta compota de manzana es un más que perfecto antojo de medianoche, de esos antojos de dulce sin sentimiento de culpa 🙂
Siempre la hago en la temporada de manzanas reinetas (otoño e invierno, aunque hasta entrada la primavera podemos conseguir) porque me gusta su sabor y su textura. Es una variedad de manzana de pulpa harinosa y tiene un punto ácido que me encanta.
La conserva da además da mucho juego para desayunar con tostadas, rellenar un hojaldre o acompañarla con helado o yogurt.
Ponemos:
- Dos kilos de manzanas reinetas, peladas y descorazonadas
- El zumo de un limón
- Un kilo de azúcar
Preparación:
Colocamos la manzana en trozos en una olla grande, rociamos con el zumo de limón, incorporamos poco a poco el azúcar sin dejar de mezclar y cocemos a fuego bajo por dos o tres horas. Removemos de vez en cuando para evitar que se pegue. La manzana se irá deshaciendo y la mezcla se reduce al menos a la mitad.
Los mismos ingredientes y un poco más de paciencia y tiempo de cocción nos dejarán también una mermelada maravillosa.
Nos puede durar varias semanas conservándola en la nevera en un bote (frasco) de cristal esterilizado.
Eso si, no me culpen si se la comen toda de una sentada, jajajajaja.