Con la vuelta al frío invernal de Madrid y a la rutina comienza mi afán de tomar sopa día sí y día también. Preparo siempre cantidad suficiente para varios días y así solo toca calentarla al llegar a casa. Aunque tengo algunas recetas base que siempre repito, voy buscando alguna nueva opción para variar y no aburrirme.
Y siempre, siempre están esos amigos dispuestos a hacer de conejillos de indias y probar todo lo nuevo. Esta vez organizamos una quedada post – Reyes para ponernos al día y busqué recetas de sopa de brócoli y queso cheddar que alguna vez me habían mencionado y hace tiempo tenía en la cabeza.
Lo de siempre cuando buscas varias recetas del mismo plato, las versiones varían algo entre una y otra y cada una es de su padre y de su madre. Entre las más sencillas está la de Delish que pueden ver aquí.
La preparación es realmente muy simple, y luego de hacer tantas listas de ingredientes como recetas fueron revisadas, decidí utilizar los siguientes para mi súper sopa:
- 1 brócoli grande
- 1 cebolla mediana
- 2 tallos de apio (celery)
- 2 dientes de ajo
- 2 zanahorias medianas
- 1 tallo de puerro (ajoporro)
- ½ pimiento verde
- ½ pimiento rojo
- 1 lt. de caldo de verduras
- 200 ml de crema de leche
- 1 cda. de harina
- ½ cda. de sal
- Pimienta al gusto
- 350 grs de queso cheddar
- 2 cdas. Mantequilla con sal
- 1 cda. de paprika o pimentón dulce
La preparación (simple y no toma más de 30 minutos):
- Lavamos y cortamos el brócoli en trozos muy pequeños eliminando los tallos más gruesos.
- Cortamos el tallo de puerro y el ajo en rodajas finas y en brunoise la zanahoria, cebolla, pimientos y apio.
- En una olla a fuego medio con un chorro de aceite de oliva y las dos cucharadas de mantequilla, comenzamos salteando la cebolla y el puerro hasta aclarar.
- Agregamos sal y pimienta, paprika, también la cucharada de harina y removemos para disolver, y seguimos con el resto de las verduras (pimientos, apio, ajo y zanahoria), salteamos unos diez minutos más.
- Agregamos el brócoli y el caldo de verduras, bajamos un poco el fuego y cocinamos por unos diez minutos hasta ablandar el brócoli.
- Por último agregamos la crema de leche y el queso cheddar rallado, removemos para mezclar y cocinamos por unos cinco minutos más para derretir el queso. Corregimos de sal y pimienta si es necesario (recordemos que el queso es bastante salado).
Servimos adornando con cebollino picado, croutons o trozos de pan tostado y un poco más de queso cheddar rallado o cortado en dados por encima.
No nos tardaremos más de una hora desde picar las verduras hasta tenerla lista. Es una de esas sopas que recompone el cuerpo, es riquísima y no hay manera de que quede mal. Probar a preparar la receta y contarme luego cuántos platos se han comido, jejeje.
Yo sigo adaptándome al frío y a la rutina, paseando por Madrid y disfrutando de cocinar cosas nuevas en casa cada vez que puedo.
¡Abrazos! Y hasta nuestro próximo post. 😉